La dama del alba es una obra de teatro escrita por Alejandro Rodrí guez Á lvarez, má s conocido bajo el seudó nimo Alejandro Casona, y estrenada en el Teatro Avenida, de Buenos Aires, el 3 de Noviembre de 1944.
Ambientada en la Asturias rural, Martí n es un joven taciturno y triste. Anda así tras la desaparició n de su esposa Angé lica, ahogada unos añ os antes en la represa del molino. Vive en una casa de labranza con su familia polí tica:
la madre,
el abuelo
y tres niñ os (André s, Falí n y Dorina).
Un buen dí a aparece una peregrina, la dama del alba, mujer mayor y reservada. La acogen con hospitalidad. Martí n, en una noche de gran nevada, rescata a Adela, una joven desesperada dispuesta a acabar con su vida. Con el paso de los dí as, los jó venes, Martí n y Adela, se enamoran y formalizan su compromiso con el beneplá cito de toda la familia.
En las hogueras de una noche de San Juan, Martí n y Adela confirman su noviazgo. Justo ese dí a la peregrina anciana vuelve otra vez a la casa, que encuentra vací a, pues todos sus habitantes está n en la fiesta del pueblo. Sin embargo, de imprevisto, aparece Angé lica, a quien todos creí an muerta. En un dramá tico diá logo entre ambas, descubrimos la verdad.
La novia no habí a muerto ahogada, sino que se habí a fugado con un amante.
Tras maltratos y vejaciones de todo tipo, decide volver a su casa, asumiendo el desprecio de los demá s.
La dama del alba, que en realidad representa la muerte, ha venido a recogerla, pues tení a una cita con ella. La anciana misteriosa logra persuadir a Angé lica para que acepte que su llegada serí a negativa para todos y que lo mejor es que realmente se deje llevar por las aguas del remanso del molino.
La dama del alba está llena de diá logos en que los personajes intentan desentrañ ar qué les supone el destino, quié n es la Peregrina, qué influjo tiene sobre ellos y qué les puede deparar su presencia. Dudan en vano, los acontecimientos transcurren por sí mismos y poco pueden hacer para detenerlos.
Alejando Casona consideraba La dama del alba como su obra favorita. Como sucede en otras obras del autor, la pieza presenta el conflicto entre realidad y fantasí a, y otros temas recurrentes del mundo de Alejandro Casona:
el suicidio,
la belleza de la muerte,
la fuerza del amor
o la incesante bú squeda de felicidad.
En palabras del autor
está dedicada a mi tierra de Asturias, a su paisaje, a sus hombres, a su espí ritu.